viernes, 1 de mayo de 2009

Ni para el aperitivo


Siete y media de la mañana. Meto un par de bocadillos, unas barritas energéticas, un bidón de agua y alguna que otra cosa más en la mochila y me dispongo a salir cuando veo que se ha puesto a llover. Y llueve fuerte. Maldita sea. Decido esperar a que amaine. Finalmente salgo a las ocho y media. Marcho por el Paseo Marítimo y a los dos kilómetros, en Cala Mayor, de nuevo cae el diluvio. Estoy un cuarto de hora agazapado bajo la marquesina de la parada de autobús. Continúo luego por San Agustín, Portals Nous, Palma Nova, Paguera, Camp de Mar, Puerto de Andratx... Llego a Andratx, kilómetro 32, y aprovecho que está lloviendo de nuevo para entrar en un bar a tomar algo. Es la una, hora del aperitivo.
-Un café con leche.
-¿Algo más?
-Y unas madalenas, por favor.
Subo el Graó (226m) en dirección a Capdellá. Diluvia de nuevo, pero esta vez no me detengo. Menos mal que dura poco. Capdellá, Palma Nova, Portals Nous, San Agustín... Termino donde empecé. A las cinco y media de la tarde. 65'5 kilómetros en 8 horas y 54 minutos (tiempo total, yo no paro el reloj ni para tomarme el aperitivo). A 8:09 el kilómetro.