domingo, 29 de octubre de 2006

Sin

Creo que todavía no lo he dicho: yo marcho siempre sin calcetines. Es algo que a mucha gente le causa cierta extrañeza y a mí algunos problemas a la hora de explicar la razón. Porque en realidad no sé por qué no uso calcetines. Bueno, sí lo sé: no los uso porque no los necesito. Lo que quiero decir es que no sé por qué un día decidí de pronto no ponerme los calcetines antes de calzarme las zapatillas de marcha. Es más, ni siquiera consigo recordar cuándo fue eso. He buscado en mi álbum de recuerdos y he encontrado fotos mías de hace quince años en los que ya aparezco sin calcetines. La pasta que me he ahorrado en todo este tiempo.
Foto: 24 horas de Malasia (2003)